La Industria 4.0 o Industria Inteligente es un nuevo modelo de industria que integra las tecnologías lot (Internet de las Cosas) en el corazón de las empresas. El Internet, los smartphones y la conectividad han cambiado por completo nuestras vidas personales en la última década, pero no habían llegado a las fábricas.
Esta cuarta revolución, trata de incorporar toda la nueva tecnología de Internet a los procesos de producción y consiste en incorporar la digitalización en las fábricas para producir de forma más inteligente.
Los antecedentes de la Industria 4.0 provienen de las revoluciones industriales, la primera reconoce la introducción de equipos mecánicos impulsados por máquinas de vapor, la mano de obra se sustituyó por las máquinas trayendo consigo un cambio de economía rural basada en agricultura a un modelo de economía industrial.
Más tarde la segunda revolución comenzó a utilizar la electricidad, la invención del teléfono y el desarrollo del automóvil, todo eso ayudó a impulsar el consumo de masas.
La tercera revolución fue basada en el desarrollo de la tecnología digital con el uso de ordenadores y el desarrollo de Internet, que permite la interconectividad entre dispositivos usando la electrónica y la informática para la producción automatizada.
De esta forma, gracias a las computadoras podemos gestionar, analizar, almacenar millones de datos, ejecutar programas informáticos o automatizar procesos mecánicos, motivo por el cual es una herramienta fundamental para el ser humano del siglo XXI. Los cambios anteriores hicieron ver la necesidad de evolucionar los procesos a un mundo digital, dando entrada así a la Cuarta Revolución Industrial o Industria Inteligente.
De tal modo, que en esta revolución los procesos están conectados mediante el Internet de las cosas o lot, que quiere decir que todo está conectado a través de redes privadas o de Internet para mandar o recibir datos y facilitar así su visualización, la interacción sin necesidad de la intervención humana.
Por lo tanto, se busca hacer el proceso de manufactura más ágil y flexible para los clientes, utilizando el análisis de datos como principal eslabón para implementar las tecnologías necesarias en la automatización de procesos.
El Internet pasó de ser un método de comunicación entre personas a ser un método de comunicación entre objetos o máquinas con personas obteniendo de esta manera datos de máquinas industriales para su análisis.
Así que, los pilares de la Industria 4.0 son: la Big Data, la simulación, la impresión 3D, la ciberseguridad, el Cloud Computing, el Internet de las cosas o lot, los sistemas ciber físicos de robótica integrada, la integración y la realidad aumentada.
Todos estos elementos mejoran el entorno de trabajo, reducen el tiempo para realizar reportes diarios, semanales o mensuales, arrojan análisis de información confiable para una más oportuna y eficiente toma de decisión, reducen los gastos, ponen a la disposición información vía remota en tiempo real de los procesos, aumentan la productividad mediante el monitoreo y control de procesos, aportan soluciones integrales a través de proyectos llave en mano, hacen posible la planificación eficiente de los procesos productivos y garantizan la cadena de valor.
En conclusión, la industria inteligente aprovecha las nuevas tecnologías para hacer a las empresas más competitivas. Es importante conocer las tecnologías, pero sobretodo, cómo podemos integrarlas dentro de las necesidades y estrategias de nuestras empresas para lograr la tan anhelada independencia tecnológica en el país.